PULSIÓN
DE VIDA*
Por:
Julio A. Guerrieri
Hace
13875 millones de años nacía nuestro actual Universo. Decimos actual porque
algunos científicos sostienen que podría haber muchos, incluso infinitos
Universos paralelos a la vez. Con nuestro Universo nacieron también las leyes
que rigen su orden y desarrollo, pero también su desorden y caos. Venimos de un
inicio muy caliente y denso y vamos hacia un frío abierto y vacío. Pero cuando
contemplamos el cielo profundo con nuestros aparatos, encontramos que las
estrellas forman las galaxias; las galaxias se unen en grupos y estos grupos
forman cúmulos de galaxias, más recientemente encontramos que los cúmulos de
galaxias se agrupan en Supercúmulos de galaxias. Todas las galaxias están
compuestas en gran parte por estrellas. Los astros primigenios estaban compuestos
exclusivamente por hidrógeno. Las estrellas, de acuerdo con sus masas, tienen
una vida determinada. Las estrellas gigantes terminan sus vidas estallando en
explosiones de Supernovas. Durante este proceso y antes que él en el horno
nuclear, los átomos se van uniendo formando elementos químicos cada vez más
pesados y en el momento del estallido la temperatura es tal que alcanza para
formar la mayoría de átomos desde el hierro al uranio. Estos átomos frescos van
a parar al medio interestelar donde forman nubes de gas y de polvo para formar
nuevas estrellas y planetas. En los planetas con átomos variados y con
condiciones adecuadas pueden formarse moléculas y luego grupos de aminoácidos y
después cadenas de ADN. Así pueden aparecer las primeras células dando origen a
la vida. Pero el proceso no se detiene allí. Los organismos vivos adecuados por
la Selección Natural pueden llegar a alcanzar la inteligencia. Observamos
entonces que existe un orden de jerarquías en el Cosmos donde la materia
visible tiende a agruparse ordenadamente desde estados simples a estados más
complejos. Parece ser un vector ineludible. Y si ocurrió en la Tierra, como las
leyes son las mismas en cualquier parte, pudo haber ocurrido en el resto del
Universo. Parecería ser que la Inteligencia es, hasta donde sabemos, el estado
final de la materia organizada que nació en el Big Bang, como una recompensa a
tanta temperatura y densidad para que el producto de esta evolución se diera
cuenta de sus propios orígenes. Ahora nos falta, claro, saber cómo va a
terminar todo esta tragedia universal llamada Cosmos. Final que, por cierto,
puede no ser feliz.
Bienvenidos
al 278º programa de EL TERCER PLANETA.
Y
gracias por estar.
*
Término acuñado por Hubert Reeves en “EL SENTIDO DEL UNIVERSO” Emecé Editorial.
TITULARES
Referencias:
EM
= Es Materia – NCYT = Noticia de la Ciencia y la Tecnología – BBCM = BBC Mundo
– NEO = Neofronteras – CO = Conicet – CAD = Ciencia al Dia – ETN = Eso Top News
– OBS = Observatorio – CX = Ciencia
Xataka – CN = Cosmos Noticias - MNP = Martín Navarro París (Corresponsalia de
El Tercer Planeta) - RTSM= RT Sepa Mas.
Cómo
unas vacaciones, el moho y la espina de un rosal llevaron al descubrimiento de
la penicilina
El
descubrimiento de la penicilina es considerado como uno de los grandes avances
de la medicina terapéutica, porque introdujo la era de los antibióticos
salvando millones de vidas. Durante largo tiempo, los científicos buscaban la
manera de combatir serias infecciones que podían ser mortales como la neumonía,
gonorrea, fiebre
reumática y otras. Los hospitales solían estar atestados de
pacientes con graves infecciones en la sangre por lo que parecerían ser simples
rasguños o cortes inocuos. En ese entonces los médicos no podían hacer nada
sino esperar y cruzar los dedos. Alexander
Fleming, un bacteriólogo y farmacólogo británico, vio cómo durante la Primera
Guerra Mundial numerosos soldados morían de sepsis por heridas infectadas.
(Seguir Leyendo)
“Nuestra
relación con la muerte es fundamentalmente doble. Apartarla lejos el mayor
tiempo posible, pero aceptarla como una parte normal de la vida. Es preciso que
las fuerzas de la vida intenten ganar, pero también es necesario que sean
vencidas. Batirse encarnizadamente para permanecer en la existencia, y acoger a
la muerte como un pasaje natural hacia un no sé qué. Quizá la nada. Quizá no.
¿Sostendrá nuestros últimos instantes la curiosidad por estar finalmente a
punto de saberlo?”
Hubert
Reeves, astrofísico canadiense.
Un
físico encuentra información sobre el alma en las células humanas
El
equipo del físico británico Roger Penrose ha encontrado pruebas de que los
microtúbulos de las proteínas contienen información cuántica sobre el ser
humano, que algunos denominan 'alma' y podría perdurar tras la muerte del cuerpo,
informa 'The Daily Express'. Penrose explica que una prueba de esta teoría es
que, cuando alguien muere, esos conductos liberan su información subatómica al
universo pero, si el proceso es temporal y logra regresar a la vida, regresa a
cuerpo: esa sería la vivencia de las personas que tienen experiencias cercanas
a la muerte. "Si el paciente no sobrevive al trance y fallece "es
posible que la información cuántica pueda existir fuera del cuerpo", como
'alma', "tal vez de manera indefinida", añade Roger Penrose. (SeguirLeyendo)
El
propósito de la educación es mostrar a la gente como aprender por si misma el
otro concepto de la educación es adoctrinamiento.
Noam Chomsky lingüista-filósofo
y activista estadounidense
La otra teoria
Hubert
Reeves (n. el 13 de julio de 1932) es un astrofísico canadiense. Ha sido director
de investigación en el Centre national de la recherche scientifique desde 1965
y actualmente vive en Francia donde suele aparecer en televisión tratando temas
de divulgación científica.
El
origen de la complejidad
Reeves
establece que la naturaleza está constituida como a partir de un alfabeto. Las
letras de ese idioma singular son las partículas elementales (indivisibles),
los electrones y los quarks. Es la combinación de esa decena de «letras»
elementales lo que permite construir el centenar de átomos
que reconoce la física. Estos átomos constituyen a su vez las «palabras» del
idioma
natural,
que, articuladas en frases u oraciones, se presentan como los cientos de miles
de moléculas distintas de la química y la bioquímica. Las moléculas, por su
parte, son constitutivas de las células y éstas de los organismos. Para
describir el número de células posibles hace falta un número de seiscientos
millones de cifras. (Seguir Leyendo)
"EL
SENTIDO DEL UNIVERSO" de Hubert Reeves, Ediciones Emecé, 286 págs.
Un
título que muchas veces se ha convertido en una pregunta para filósofos, y
científicos de todas las épocas. Es aquí donde el autor quiere "ir hasta
el hueso" con su idea y para ello muestra el profundo panorama en el que
se desarrolló el Cosmos desde que nació. Parecería que un plan ó una especie de
organizador prepara el escenario de todas las cosas, pero Reeves nos muestra
enseguida una Naturaleza donde ella misma se encarga de gestar la complejidad
que inexorablemente conduce a la aparición de la vida. Las leyes de la física,
de la química, de la bioquímica y de la biología nacieron con el Universo y el
tiempo se encarga de su aplicación en las regiones del espacio donde las
condiciones dictadas por estas mismas leyes sean las adecuadas. Un libro que presenta
el desafío de no poder cerrarlo hasta la última página. Excelente. JG
No hay comentarios:
Publicar un comentario